Monday, July 31, 2006

Decir Adiós
Decir adiós, pareciera ser una palabra tan fácil de decir..., y aunque puede tener un sin fin de motivos, se resume en el simple hecho de que cada adiós corresponde al término de un ciclo en la vida de cada persona y significa que algo está en proceso de cambio.

Decir adiós es parte de la vida, pero también es cierto que algunas despedidas cuestan más que otras y los sentimientos que acompañan el adiós perduran por largo tiempo, o quizá nunca desaparecen, sólo se atenúan conforme el tiempo o la distancia producen su efecto en el corazón y en la memoria de cada persona. Cuando esto ocurre, se descubre el verdadero significado de compartir, se descubre que los momentos que han pasado ya ... siguen ahí, formando parte de tu vida, porque son la huella de lo que un día viviste y el recuerdo de lo que una vez existió.
Decir adiós, suele ser el resultado de una decisión tomada para procurar el bienestar personal, otras veces, porque forma parte del camino que se recorre día con día, aunque con ello se deje atrás personas o lugares especiales; personas y lugares que poco a poco se identificaron con pensamientos y sentimientos de igual forma especiales, con quienes al compartir, un día descubres que son parte de ti y que no basta con decir adiós para que dejen de serlo, porque siempre existirán los lazos que te unen a lo que más amas, a tu origen, al hogar donde aprendiste a ser quien eres.
Decir adiós es sinónimo de tantas despedidas...,pero aún así, la historia puede no acabar cuando se dice adiós, quizá, decir adiós sólo es retrasar un reencuentro, quizá es sólo no anticipar lo no previsto, lo no imaginado, quizá es el deseo de convertirlo en un hasta luego.